Tras la batalla de Issos, el camino a Babilonia parecía expedito. No eran pocos los oficiales macedonios que apremiaban a Alejandro para dirigirse derecho a asestar el golpe definitivo a una de las piezas básicas del imperio persa.
Sin embargo, el genio de Alejandro sobrevolaba siempre por encima del pensamiento de los mortales y dirigió su ejército al sur. Quería tomar Tiro, Sidón, Gaza, Trípoli y Biblos, las plazas fenicias de la costa, para destruir la flota persa e impedir cualquier maniobra que amenazara su campaña desde la retaguardia. La juvenil y famosa impaciencia de Alejandro no era en absoluto una peligrosa merma, sino la fuente de un ímpetu que le hicieron el más grande guerrero y estadista de la historia.
La campaña del Club Natació Sabadell respeta cada uno de los pasos, sin dar por hecha ninguna etapa. Tras la formidable victoria de la semana pasada ante el Mediterrani, nadie se ha visto con la temporada coronando la testa y la expedición sabadellense se ha dirigido al oeste, a expugnar Alcorcón.
Las ciudades fenicias resistieron más de lo que esperaba el propio Alejandro, por lo que las represalias fueron durísimas. Batis, el comandante de Gaza, fue condenado a morir cruelmente, arrastrado por un carro, y la población vendida como esclavos. Pero esta faceta oscura de la aventura helenística se debe entender como parte de la guerra, como una lección para quienes en el futuro pretendieran resistirse a la conquista macedonia.
Caído Alcorcón, la primera fase de la Liga parece expedita. Ahora, sin embargo, el equipo sabadellense calibrará su carácter. Se desviará hacia el santuario de Siwa, en un oasis del desierto libio, para intentar comprender su origen y con él su destino. Interrogará al oráculo de Amón y obtendrá una respuesta, unos resultados, que le revelarán si su condición es divina o no y sus expectativas futuras como equipo en Europa. "¿Me convertiré en soberano del todo el mundo?", preguntó Alejandro al oráculo. "¿Me convertiré en equipo de final four?", preguntará el Sabadell en Nancy (Francia).
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